Nos hemos acostumbrado a ver en películas unas apasionantes sesiones de hipnosis donde el hipnotizado extrae recuerdos olvidados o retrocede a hechos del pasado donde los revive con extraordinaria nitidez.
Incluso en Estados Unidos hubo una época donde se aceptaban en juicios declaraciones bajo hipnosis de abusos infantiles y otros crímenes para procesar a los presuntos culpables.
Como podéis imaginar es muy peliculero pero la base científica es nula. Se hicieron experimentos con gente, típico experimento donde se enseñan imágenes, películas, etc., a dos grupos, a uno de ellos se le interroga sobre lo que recuerda en condiciones normales y a otro grupo bajo hipnosis. Los resultados han apuntado que bajo hipnosis se recuerda peor, y que bajo el efecto de la sugestión hipnótica el paciente tiende a complacer al hipnotizador, es decir recordará lo que el hipnotizador sugiera. Por dicho motivo cuando una persona se somete a hipnosis para comprobar si fue abducido por extraterrestres, prácticamente el 100% recuerdan haber sido abducidos.
Como véis queda muy peliculero, pero en la vida real es un técnica inútil y contraproducente. Como supondréis tampoco se puede hipnotizar a alguien en contra de su voluntad ni obligarle a cometer delitos bajo hipnosis. Todo esto está muy bien para las películas pero no es real.
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