Apple se ha erigido como el gran defensor de la privacidad en el mundo tecnológico. Sus anuncios, repletos de mensajes subliminales sobre el valor de nuestros datos, nos hacen sentir como si estuviéramos en manos de un guardián celoso de nuestros secretos digitales. Sin embargo, si escarbamos un poco más allá de la superficie pulida, descubrimos una realidad un tanto más... compleja.
La privacidad, ¿un lujo o un producto más?
Apple nos vende la privacidad como un producto premium, algo que solo los usuarios de sus dispositivos pueden disfrutar. Sin embargo, ¿qué tan cierto es esto? La compañía recopila una enorme cantidad de datos sobre nuestros hábitos de consumo, ubicación, salud y demás actividades digitales. Aunque aseguran que estos datos se utilizan para mejorar nuestros productos y servicios, la pregunta es: ¿hasta qué punto podemos confiar en ellos?
Privacidad: un entorno es privado si nadie te espía, no es privado porque sólo te espía Apple. Es decidir qué muestras y que no, y que esa decisión sea tuya.
El jardín amurallado de Apple: ¿un oasis de privacidad o una prisión dorada?
Apple nos invita a su "jardín amurallado", un ecosistema cerrado donde todo funciona a la perfección... siempre y cuando juguemos según sus reglas. Este ecosistema, aunque aparentemente diseñado para proteger nuestra privacidad, también nos limita y nos hace dependientes de sus productos y servicios. Al fin y al cabo, ¿quién controla los datos que están encerrados en un jardín?
El ecosistema cerrado: nada se puede hacer en IOS fuera del ecosistema, en android con sus limitaciones existen las ROMs personalizadas que nos permiten escapar, pero en Iphone no existe nada similar estamos atrapados. Mac OS sería más privado que Windows pero por detrás de los sistemas libres, pero IOS es una trampa sin salida.
El doble rasero de Cupertino
Apple se ha mostrado muy crítica con las prácticas de otras empresas tecnológicas, acusándolas de violar nuestra privacidad. Sin embargo, cuando se trata de sus propios productos, parece aplicar un doble rasero. ¿Recuerdan cuando se descubrió que Siri grababa nuestras conversaciones y las enviaba a sus servidores? O cuando se reveló que Apple rastreaba la ubicación de sus usuarios incluso cuando el servicio de localización estaba desactivado?
¿Privacidad? Más bien, vigilancia disfrazada de innovación. Apple nos vende la idea de que sus productos son más seguros que los de la competencia, pero la realidad es que todas las grandes tecnológicas recopilan datos. La diferencia es que Apple lo hace con una sonrisa y una promesa de que nuestra información está a salvo. Claro, como si nuestros datos fueran a estar más seguros en las manos de una empresa que vale billones de dólares.
Apple ID: para acceder a tus dispositivos necesitas asociar los datos a Apple ID, imposibilita el anonimato. En iPhone es imposible usarlo sin él y en Mac OS complicado. Esto ya limita que puedes instalar y que no.
Y no nos olvidemos del famoso "Face ID". Es una herramienta de reconocimiento facial que Apple utiliza para rastrear nuestros movimientos y expresiones faciales. ¿Para qué? Bueno, nadie lo sabe con certeza, pero seguro que se les ocurrirá algo interesante.
Publicidad: prometen que no venderán tus datos pero cada vez invierten más dinero en su personal de publicidad, ha duplicado su personal en publicidad, ésto debería haceros pensar.
Lo fiable: lo más fiable es el software libre que tiene código público y auditable, todo lo que sea cerrado y no tenga código publicado, no se sabe lo que hay detrás y lo razonable es desconfiar.
Conclusión: Apple es un entorno cerrado, lo más cerrado que existe, lo entregas todo aunque no es muy diferente a otras plataformas, el problema de Apple es que sus dispositivos son cerrados y aunque sus ordenadores permiten alguna escapatoria, sus móviles no, estás en sus manos y no podrás instalar nada que ellos no quieran. Con un móvil típico android o un PC siempre puedes cambiar el sistema con más o menos dificultad, con un iPhone es imposible y con un ordenador Apple complicado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario